martes, 19 de junio de 2012

Gilani y la Corte Suprema.

La Corte Suprema de Justicia de Pakistán ha declarado que el Primer Ministro Yousuf Raza Gilani ha dejado de ser el jefe de Gobierno. La causa es por desobedecer órdenes del tribunal para investigar las cuentas bancarias que el presidente Asif Alí Zardari tendría en Suiza, acusado de corrupción junto a su fallecida esposa, asesinada durante la campaña electoral, la ex primer ministro Benazir Bhutto. 
La medida se convierte en retroactiva hasta el 26 de abril, por lo que la Corte Suprema llama al Parlamento a nombrar un nuevo jefe de Gobierno, pocos meses antes de los comicios legislativos.
No sólo, entonces, Pakistán se halla en una difícil situación internacional y con regiones como Waziristán en donde se refugian terroristas vinculados a los Talibán, con tendencias centrífugas de etnias que buscan mayor grado de autonomía, sino también con una crisis política del partido que está gobernando desde el fin del régimen autoritario de Pervez Musharraf.

jueves, 7 de junio de 2012

Advertencia en voz alta y clara de Leon Panetta.

El secretario de Defensa de los Estados Unidos, Leon Panetta, ha advertido al gobierno pakistaní que debe controlar sus fronteras con Afganistán y que su territorio debe dejar de ser el santuario de los Talibán y Al Qaeda en la región. En este blog, hemos venido señalando cómo está aumentando la presión diplomática al gobierno del presidente Zardari para que tuviese un control efectivo sobre la región de Waziristán Norte, parte de las Federally Administered Tribal Areas (FATA), de población mayoritariamente pashtún. Esta presión y la visita de Panetta a Afganistán coinciden en el tiempo con la cumbre de la Organización para la Cooperación de Shanghai, que se está celebrando en Beijing. Los actores del Gran Juego en el centro de Asia están moviendo sus piezas en el tablero, prefiriendo emplear la sutileza y elegancia del Go antes que la furia contenida del ajedrez.

miércoles, 6 de junio de 2012

La Organización para la Cooperación de Shanghai.

Vladimir Putin y Hu Jintao


En los días 6 y 7 de junio se reunirán en Beijing los miembros de la Organización para la Cooperación de Shanghai junto a los miembros observadores. Los miembros plenos son Rusia, la República Popular China, Kazajstán, Kirguistán, Tadjikistán y Uzbekistán; en tanto que los observadores son la India, Pakistán, Irán y Mongolia.
Esta organización tuvo su primer encuentro en Shanghai en 1996, y hasta junio del 2001 (cuando se incorporó Uzbekistán) se denominó los "Cinco de Shanghai", institucionalizándose cuando se resolvieron  los problemas fronterizos que China tenía con los países que lo componen. Sus propósitos iniciales -que siguen siendo prioritarios para la OCS- son el combate contra el terrorismo, el separatismo y el extremismo, lo que resulta comprensible desde la óptica de que los gobiernos de estos países se sienten amenazados por el islamismo, las tendencias independentistas de algunas regiones -como es el caso de los uigures en China- y la inseguridad de la presencia de los Talibán en Afganistán y Pakistán. 
A partir del 2005 tiene un secretario general de tres años de duración con sede en Beijing, y una Estructura Regional antiterrorista, con base en Tashkent. A las reuniones anuales también se invita a líderes como el presidente afgano, Hamid Karzai, y se han sumado como socios de diálogo a Sri Lanka y Bielorrusia, ampliando sustancialmente su esfera de influencia.
Desde el 2002 en adelante, la OCS realiza ejercicios militares conjuntos para el entrenamiento de fuerzas antiterroristas, con simulacros de secuestros, ataques a plantas nucleares o copamiento de poblaciones. También ha sido activa la extradición de disidentes separatistas e intercambio de información. Los países signatarios tienen en común su rechazo a las demandas occidentales de respeto a los derechos humanos y garantías constitucionales del debido proceso, a las que consideran como "intervenciones" en "asuntos internos" propios de cada nación. La paradoja es que los cuatro países de Asia Central que participan en la OCS también reciben ayuda financiera de los Estados Unidos, como un modo de equilibrar la fuerte presión rusa y china.
La República Popular China suele poner énfasis en los aspectos vinculados al comercio y el desarrollo económico, siendo pródigo en inversiones. La visión rusa, en cambio, pone su acento en lo relacionado con la defensa y seguridad. Los países occidentales, en particular el gobierno de los Estados Unidos, ve a esta organización como un posible embrión rival de la OTAN, hecho que se acentuaría si llegara a prosperar la iniciativa rusa de incorporar a Irán como miembro pleno, a lo que se opone la República Popular China. 



Bibliografía consultada

William E. Carroll, "China in the Shanghai Cooperation Organization: Hegemony, Multi-Polar Balance, or Cooperation in Central Asia", en International Journal of Humanities and Social ScienceVolumen 1, número 19; diciembre 2011.
Julie Boland, "Ten Years of the Shanghai Cooperation Organization: A Lost Decade? A Partner for the U.S.?", 21st Century Defense Initiative at Brookings, Policy Paper, 20 de junio 2011.
Alexander Frost, "The Collective Security Treaty Organization, the Shanghai Cooperation
Organization, and Russia’s Strategic Goals in Central Asia", en China and Eurasia Forum Quarterly, Volumen 7, Número 3, 2009.

sábado, 2 de junio de 2012

Hamid Karzai, hasta el 2014.

El presidente afgano Hamid Karzai ha negado que busque una nueva reelección en el año 2014, tal como lo han informado varios medios periodísticos de Occidente. En tal sentido, afirmó que quiere ser un ciudadano normal y que apoyará al próximo primer magistrado con su consejo, si se lo pide.
Estas especulaciones en torno al futuro más o menos próximo de la política afgana son parte de la preocupación por el retiro de las tropas de la OTAN, programadas a partir del 2013 en forma escalonada. La reelección de Hamid Karzai en el 2009 fue cuestionada en su falta de transparencia durante el proceso electoral, a lo que el actual presidente llamó un nuevo error por parte de los occidentales, recordando que tanto los gobiernos de Estados Unidos como los de Europa ayudaron a los señores de la guerra en el pasado con dinero y armas. En el 2009 su rival electoral fue el ex ministro de Relaciones Exteriores Abdullah Abdullah, quien desistió de presentarse al ballottage aduciendo falta de garantías para comicios limpios.